El pasado lunes el video de
un hombre pateando a su perro en las calles internas de un country de Tafí Viejo, se viralizó a traves de las redes sociales y generó indignación. La situación derivó en una denuncia contra este vecino del barrio Pinar 1.
Ayer jueves por la noche, la presentación judicial realizada por maltrato animal tuvo sus frutos ya que el juez a cargo de la causa, tras varios días de juntar pruebas, ordenó un allanamiento en la vivienda para que el animal fuera puesto a salvo en un hogar de tránsito.
Karina Garbero, la tucumana que lucha por los derechos de los animales, contó a
eltucumano.com cómo fue el operativo en la casa del acusado, que comenzó con el pie izquierdo, ya que al llegar junto con agentes de esa comisaría, se dieron con que en la vivienda no estaba ni su dueño ni el animal.
“Teníamos que estar presentes antes de las 20. Yo era la depositaria por lo que me tenían que entregar el perro a mí.
Cuando llegamos no había indicios de nada. Tocamos el timbre, las manos y nada. Nos dijeron que se habían ido al mediodía”, explicó Karina, que luego aseguró que tras hablar por teléfono con el dueño de la vivienda, entraron en un confuso ida y vuelta para dar con el paradero del ovejero belga negro llamado "Clarita".
Tras más de dos horas en el barrio privado ubicado en avenida Constitución al 2.200, los agentes decidieron desistir del operativo y regresaron a la seccional. Horas después, de manera voluntaria, el denunciado se hizo presente con 'Clarita' donde permaneció hasta que fue buscada por Karina quien la llevó a su hogar transitorio.
“Estaba muy, muy asustada. Le digo a uno de los oficiales: ‘mirá ella responde al mando de la voz de un hombre’. Yo le decía ‘Clarita’ y nada. Cuando le hablaba un oficial, no sabés cómo se ponía. Miedosa de cualquier ruido y con la cola metida. Y siempre la tenía alzada, porque tenía una piola. Estaba intranquila”, detalló.
Ahora, Karina está a la espera de que el juez autorice la adopción del animal y asegura que no regresará a su antiguo hogar. “Estamos viendo de hacerle la inhibición para que no tenga nunca más un animal”, adelantó. Y agregó: “Si él no entrega el otro animalito, se hará otro allanamiento”, cerró Karina, que agradeció al comisario Inspector
Eduardo Luna, al jefe de la comisaría
Ariel López y el oficial
José Olea, miembros de la Regional Norte; y al subjefe de Policía
Rolando Gómez, por su predisposición para tratar de poner a salvo a Clarita.