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La luna tucumana y el avión, desde barrio El Bosque

LA FOTO MÁS BUSCADA

Más de dos años y medio le tomó al autor conseguir la postal perfecta. Un estudiante de secundaria y su cámara semi réflex. La movida spotter de Tucumán.





963 días esperó Juan Pablo Reyes para tomar su foto perfecta: un avión cruzando la Luna Tucumana. Fue a las 17:57 de ayer sábado, soleado y agradable; más otoñal no viene en el mercado provincial. Él, un joven de 16 años y estudiante de la secundaria, estaba en el patio de su casa de barrio El Bosque cuando mediante una aplicación de seguimiento de vuelos, detectó detectó una nave de Aerolíneas Argentinas (en la ruta Córdoba-Salta) que podría cruzar frente al satélite natural. Hizo unos breves cálculos, según la elevación y trayectoria de la aeronave, y buscó su Nikon Coolpix P520 para esperar el momento preciso. Apuntó a la luna, respiró hondo y...  ¡Clic! La espera había terminado.

"Estaba sentado en el patio de mi casa y un amigo me dice que el AR1819 probablemente cruce la luna. Ahí es donde entré a Flightradar24, vi la altitud en la que venía el avión, y la posición de la luna. Pensé que no la iba a a cruzar y por las dudas empecé a configurar la cámara y practicar algunas fotos a la luna para ver si la configuración estaba bien. Cuando lo vi al avión ingresado a la ciudad tucumana con dirección sur-norte vi que iba bastante alineada a la luna. Se empezó a acercar, yo ya tenía apuntando la cámara con la luna esperando el cruce, y ahí es donde se dió la foto, con un miedo de que no me salga", describe el joven.

Juan Pablo sueña con ser piloto de aviones comerciales. Hasta iniciar ese despegue, dedica su tiempo libre a hacer spotting, una práctica que consiste en hacer seguimiento fotográfico de distintos medios de transporte, en especial aviones. A esos aficionados se los llama spotters, y el estudiante de secundaria es sólo uno de la veintena que hay en Tucumán.

Cada tanto, Juan Pablo va hasta el Aeropuerto Internacional Benjamín Matienzo para fotografiar los aviones desde atrás del alambrado, previo aviso a la Policía de Seguridad Aeroportuaria. El joven recuerda que antes la administración de la estación aérea habilitaba una terraza para los fotógrafos aficionados.

"Cuando uno entra a ser spotter, cada uno se propone su objetivo al tomar una foto. Si sacamos un porcentaje, la mayoría de los spotters sueña con tomar esa foto, la del cruce con la luna, y mucho mejor si se da de noche con la silueta del avión sobre la luna", se regodea Juan Pablo.