Top

A Petro con cariño: los ex alumnos del JIM emocionaron al kiosquero más querido

HISTORIAS DE ACÁ

Hace más de 40 años que vende golosinas en la puerta del Juvenil Instituto Moderno. Sufrió un robo la semana pasada y la comunidad se puso manos a la obra: "Es uno de los grandes personajes de la historia del colegio, se merece lo que hicimos y mucho más".

Petro y el regalo de los ex alumnos del JIM. Las fotos son Daniel Dantur.





Esta es la historia de Petro, de una bicicleta y de décadas de alumnos entrando y saliendo por la puerta del JIM. Es la historia que empieza frente al instituto, en una puertita de madera encadenada a unas rejas verdes con dos candados. Ahí, detrás de esa puerta, Petro guarda las cosas que vende como el kiosquero del colegio y el transporte en las que las traslada: una bicicleta negra de reparto que pedaleó por las calles tucumanas durante más de 50 años: “Yo tengo 36 y desde que yo iba al jardín maternal del colegio, Petro ya usaba esa bici”, cuenta Juan Luis Stok, uno de los protagonistas de lo que pasó a continuación.

El tema es que la semana pasada, cuando Petro entró por la puertita de la calle Junín al 600, dejó su bicicleta afuera, alguien pasó y se la llevó. Enzo Sánchez, uno de los ex alumnos, compartió la triste noticia en las redes sociales y en el grupo de WhatsApp integrado por varios compañeros de distintos cursos: “Le robaron la bici a Petro”, “Le robaron la bici a Petro”, “Le robaron la bici a Petro”, “Le robaron la bici a Petro”. El mensaje se replicaba por todos lados. Ese mensaje llegó a Juan Luis, que no esperó a recaudar fondos ni nada que le hiciera vivir a Petro un minuto más con la angustia.

“Me metí a la primera bicicletería que vi y le compré una bici. Petro es mucho más que un kiosquero para nosotros. Es uno de los grandes personajes de la historia del JIM. Nos cuidaba a todos nosotros desde que entrábamos al colegio hasta que nos íbamos. Si algún padre se demoraba en buscar a su hijo, Petro se quedaba a su lado hasta que lleguara”, le cuenta a eltucumano.com Juan Luis, familiar de Amelia y María Luisa Ascárate, las hermanas que pusieron en marcha su sueño de crear el Juvenil Instituto Moderno hace 52 años.  

Con la bici nueva, Juan Luis y Enzo fueron con la sorpresa a visitar a Petro: “Llegamos con la bici y le hicimos una broma: ‘Esta bici es por todos los juguitos que no te pagamos’. Y era así: las veces que no teníamos para el Taclín o el Cootam y Petro lo mismo nos daba. Estaba muy contento con la bici nueva. La miraba, y notaba que le buscaba algo: el canasto para cargar las cosas y seguir vendiendo. ‘Esta bici es para que ya dejés de trabajar y salgás a pasear. Ya trabajaste toda tu vida’, le decíamos”.

"Cuidaba de nosotros, siempre fue un buen tipo. Enzo Sánchez puso en conocimiento a todos de la situación. Como una gran comunidad se pusieron todos de acuerdo. Petro es casi un amigo mío, siempre está en la cuadra. Dejo el auto, charlamos, hablamos de fútbol", agrega Daniel Dantur, quien retrató la emoción de don Petro junto a Enzo Sánchez y Juan Luis Stok frente al colegio con la bici nueva.

La emoción le tocó el corazón a Petro, pero no quería saber nada con el regalo: “No, no la puedo aceptar. ¿Cuánto gastaron? La quiero comprar”, les dijo a los muchachos: “No lo podíamos creer. La quería pagar. ‘¡No hace falta, Petro! No te vengo a vender nada, te la vengo a regalar’. Pero él quería seguir trabajando, me preguntaba si podía usarla”, cuenta Juan Luis, mientras Rubén, uno de los porteros del colegio desde hace 15 años, se sonríe cuando le preguntan si Petro va a descansar: “Empezó en el ferrocarril y ya tiene más de 80 años. Debería estar descansando, pero ayuda a su hija en el kiosco y también vende achilatas en la Córdoba y Junín. Él sabe que todos lo respetamos y lo queremos. Petro es un hombre ejemplar. Y anda contento con su bici nueva. Esos chicos valen oro”. 

La familia que es el JIM emocionó a muchísimos tucumanos que compartieron la historia de Petro. Lo resume Juan Luis: "Nos llegaron muchísimos mensajes y llamados. De verdad somos una familia. Por dar un ejemplo, en mi curso éramos 12 primos. El JIM es un colegio que queremos mucho: ir al colegio era ir a juntarte con los amigos de toda tu vida, para aprender, a disfrutar. El colegio en sí, era como estar en casa. De hecho, el fondo de mi abuela da al fondo del JIM. Es un colegio con gente buena, con valores, que nos marcó la vida. Y miren el semejante personaje que nos cuidó. Petro se merece todo esto y mucho más".





Las fotos de los alumnos del JIM que se pusieron en campaña para ayudar al querido Petro. Son gentileza de Juan Luis Stok: