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Sin fútbol: La carencia de ideas complica cada vez más a Atlético

ANÁLISIS

El Decano mostró un juego pobre ante un Vélez que lo hace de muy buena manera cuando tiene la pelota en los pies. La presión fue lo mejor que mostró el equipo de Zielinski.

Foto: Pinterest.





Con la actitud y la presión ya no alcanza, como en otros momentos. Porque ya no hay un goleador o una figura que, con un acto de magia individual, convierta y te cambie el partido. Eso hace que la carencia de juego y de ideas para crear peligro quede más expuesta, y eso es lo que le pasa a un Atlético que ante Vélez tuvo una sola chance de gol.


El primer tiempo mostró un equipo que presionó bien, en partes, pero que enfrente tuvo un rival que cuando le das la pelota, la mueve y muy bien. Eso lo pagó con un gol y varias situaciones que pudieron terminar en el fondo de la red, pero Vélez nunca estuvo fino en los metros finales y por eso siempre hubo vida.


En el complemento se vio otra actitud, con una defensa un poco más ordenada, pero bastante al límite. Con un Alejandro Sánchez que se mostró atento la mayoría de las veces y poco tuvo que hacer en el gol. Con unos laterales que no son laterales y eso se nota cuando tienen que pasar al ataque, como es el caso de Marcelo Ortíz, o como cuando hay que defender, como lo hace José Luis Fernández. Tampoco están se mostraron confiados Bruno Bianchi y Yonathan Cabral, y si la última línea duda, la podes pagar caro. Pero el Oso siempre se encargó de mantener con las chances de empatar.


El sector medio es de lo más flojo, y termina repercutiendo en la delantera. Flojo con la pelota en los pies, porque no sabe qué hacer con ella. Gonzalo Castellani aún no muestra lo que se espera de él, Federico Bravo no está para eso, Guillermo Acosta está lejos de su mejor versión y Tomás Cuello aún no explota. Por ahí el ingreso de Ramiro Carreras le da un desnivel, pero también queda en la nada, como los desbordes de Lucas Melano.


Así, también es muy difícil que la pelota le llegue a un Leandro Díaz que hoy estuvo solo adelante para pelearla, pero tampoco la peleó tanto como en otros partidos y solamente pateó una vez al arco, en una pelota recuperada por el Bebe, en el primer tiempo, que terminó con un remate que se fue desviado al tiro de esquina.


Atlético no creó ninguna situación, pero si tuvo una chance, y muy clara. Aprovechó la mala salida del arquero Lucas Hoyos para, en tres toques, dejar sólo a Augusto Lotti de cara al gol, pero al Decano no le salió ni esa y se fue por arriba del travesaño.


Esto es el Atlético de Ricardo Zielinski, un equipo que presiona bien al rival y trata de incomodarlo en cualquiera de las canchas, pero cuando lo hace bien, la termina mal. Y cuando tiene la pelota en los pies no sabe qué hacer con ella. Ahora el próximo sábado, tendrá en frente un Independiente que también llega golpeado, para el cachetazo. Esos rivales que sirven para ganarles con autoridad y que sirva de punto de partida, o para que te hundas y sea complicado salir. Esperemos que sea la primera de las opciones.