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"Abraza la camiseta de San Martín como el papá": Simón, el hijo de Matías Diarte

HISTORIAS DE ACÁ

Pesó casi cuatro kilos cuando nació y desde ese día revolucionó a una familia que sufrió la pérdida del joven luego de viajar a alentar al Santo a Formosa. Las fotos de esta nueva etapa y la felicidad que encontró la mamá después del dolor.

Simón Diarte, Cirujita desde la cuna. Las fotos son de María José, la mamá.





“Es igual a Matías”, se emociona Majo, la mamá de Simón, cuando mira una y otra vez las fotos de su bebé. Es el hijo de Matías Diarte, el hincha de San Martín que falleció luego del viaje a Formosa para ver a su equipo contra Boca. “Nació grande, pesó 3,950. Quería que fuera por parto natural, pero fue por cesárea. Ahora cumple 2 meses y ya pesa más de seis kilos. Va a ser grandote, como el papá”.

Las fotos que mira María José González Collante son las que retrató en su estudio Agustina Martínez. Cuenta la mamá que el pequeño gran Simón nació el 27 de mayo y que básicamente desde ese día ella casi no pega un ojo: “Aquí estoy: aprendiendo a ser madre, amanecida. Es tranquilo, pero desde la 1 hasta las 5 llora por los cólicos. Simón es un relojito: a las 11 de la noche lo baño, a la 1 se levanta y ya no se duerme. Sí duerme a la siesta. Y ahí aprovecho yo”.

En las fotos que acompañan esta nota, Majo detalla: “Es igual a Matías, cambia la fisonomía, tiene mi nariz y la forma de mis ojos, pero son bien claritos, igual que él. La boca es de los Diarte, duerme igual que el padre y vive con la frente fruncida. Las patas y las manos, iguales”, se ríe la mamá que no dudó en un detalle cuando fue al estudio de Las Heras al 400 a hacer las fotos: “Es la camiseta de él, de Matías. Mi hermano me quería dar la camiseta de él, pero yo quería que llevara la que dice Matías. Cuando estábamos haciendo las fotos, le dije a la fotógrafa: “Si agarra la camiseta de San Martín, estamos salvados. Y la abraza igual que lo hacía su papá”.

Después de las fotos de Simón, la fotógrafa Emilia supo la historia del papá, supo del ataque en la ruta de Formosa por parte de hinchas de Boca y de las acciones legales que se iniciaron en un sanatorio privado de Tucumán: “Quedó re emocionada cuando se enteró, conmocionada. Me contó a veces renegaba de algunas cosas, pero cuando supo lo que nos pasó, escribió en su Facebook: ‘Después de la tormenta salió el sol’. Y es así: he convivido y he atravesado muchas cosas desde que falleció Matías”.

Cinco baby showers tuvo Majo durante la espera de Simón. Y entre regalos y cosas ricas, no podía cumplir con lo que se prometía: no llorar. “Me considero fuerte, pero no sé qué hubiese hecho otra persona. Él me ha dado la fuerza para superar todo: he pasado la muerte de él, he vivido el embarazo con una situación muy grave como el dolor de su muerte. El médico mismo me decía: ‘María José, no hablés mucho de Matías, puede afectar al bebé’. Pero a mí sí me hizo bien la situación de hablar de él lo que era, de que lo extrañaba mucho, de que lo he enfrentado. Si no estaba embarazada, no sé cómo hubiera asimilado la muerte de él: prometí no llorar, pero he sabido enfrentar a él, quería sacar fuerzas para darle tranquilidad a mi bebé”.

Las fotos de Simón son de película: ese bebé que duerme y sueña con una paz que contagia es lo que ha revolucionado a la familia Diarte. Y a los amigos de Matías, quienes no ven las horas de hacer socio al bebé y llevarlo a Ciudadela cuando la mamá les dé permiso: “Uno de los chicos amigos de Matías trabaja en la cancha y me pidió bien tenga el dni, le hagamos el carnet. Son tremendos. Ya me preguntaron lo de llevarlo a la cancha, pero acá decide la mamá”, susurra Majo, porque Lita, la mamá de Matías, acaba de hacer dormir al pequeño: “Tres cunas nos regalaron: el moisés ya le queda chico, y ahora pasó a la cunita. Cuando duerme, duerme así, como en las fotos. Y cuando se despierta, estoy a su lado. Siempre va a ser así. Así lo hubiera querido él, así lo sentimos todos”.

Simón en los brazos de Majo, su mamá.