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Damián Arce: "Los hinchas nos motivan a pegar el salto a Primera"

RUMBO A LA ILUSIÓN

El volante que llegó a Ciudadela para ser campeón volverá a la titularidad este sábado contra Almagro: "Jugar de local con 35 mil personas no tiene precio, queremos poner a San Martín donde se merece". La ansiedad desborda a los Cirujas que coparon el entrenamiento.

Damián Arce sueña con el ascenso con San Martín.





Damián Arce quiere comer milanesas. Desde que llegó a Tucumán no probó el famoso completo con picante. Vive en Yerba Buena, pasa seguido por la vereda de El 10, pero explica que no, que simplemente no se dio el momento de comer un sandwich, que ya lo hará para celebrar un triunfo, tal vez en Potente, a pasitos de la cancha. Por lo pronto, Damián Arce sale a hacer las compras para la última cena en familia antes de viajar esta mañana a Buenos Aires y mientras compra las milanesas aparecen los hinchas de San Martín: "Eh, ahí está Damián Arce". Y Damián Arce recibe un adelanto de lo que le pasará esta mañana: el cariño de los hinchas, "la caricia de los hinchas", como él dice. "Sí, lo de los hinchas te pone muy contento. Salgo a comprar y te sacan fotos, te reconocen, te dan sus opiniones. Jugar de local con 35 mil personas no tiene precio, es un momento para disfrutar".

La señora de Damián Arce prende el horno, con su nena arman las ensaladas, ya están doraditas, a punto. Comen las milanesas, comen las ensaladas, y disfrutan del momento en familia antes de emprender el viaje. "Cuando entreno, estoy 100% metido. Fuera de los entrenamientos, trato de que no me coma la ansiedad. Trato de no pensar tanto, de vivir el momento, de disfrutar estos momentos, de estar con mi hija, de salir a tomar el té con mi señora. Hay que disfrutar todo".

Son las 8 de la mañana. Damián Arce se levanta, se despide con un beso de su familia y llega a Ciudadela para el último entrenamiento. Empiezan a practicar cuando desde afuera comienzan a llegar los murmullos que se convierten en voces que se convierten en arengas que se convierten en gritos: son cientos y cientos de hinchas que fueron a despedir al plantel listo para subirse al avión rumbo a Aeroparque. "Lo de la gente es increíble", insiste Damián, quien no esconde su sonrisa.

"Estamos contentos porque venimos haciendo las cosas bien. Es un momento muy importante, es un partido muy importante que habrá que trabajarlo para conseguir los tres puntos. Ellos se juegan mucho y nosotros también", palpita el volante que llegó como primer refuerzo a San Martín, recomendadísimo y dirigido por Forestello en Patronato, titular contra Los Andes y Riestra, suplente ante Santamarina y Chicago, y de vuelta al ruedo en este partido clave del sábado a las 17, en reemplazo de Matías García.

"Me ha tocado estar afuera, pero aquí no hay revancha. Rubén necesita un plantel sano que compita. Necesitamos de todos. Es un plantel con carácter, muy luchador, que salió de lo más difícil, que esperó que lo cacheteen para demostrar y lo sacamos adelante entre todos", destaca Arce, volante con llegada al gol, con ganas de hacer un gol mañana, mientras recuerda el que le hizo con la camiseta de Patronato a Boca en la Bombonera hace apenas unos meses: "Fue el más importante de mi carrera, el que me marcó a fuego. Ojalá en San Martín pueda hacer un gol que signifique mucho".

El recuerdo del gol en la cancha de Boca, mientras viaja a Buenos Aires con San Martín, lo conduce a Damián Arce a Primera, al deseo grande de ascender a Primera, de cumplir ese deseo que la multitud de hinchas repetía y cantaba sin cesar esta mañana en Ciudadela: "Es lo que queremos todos. Nos da bronca estar en esta categoría, sabemos que estamos ahí. Queremos pegar el salto, los hinchas nos motivar a pegar el salto a Primera. Queremos poner a San Martín donde se merece, la gente es muy seguidora, y necesita estar arriba", cierra Damián Arce, con hambre de gloria y el número en la mano para festejar después del partido contra Almagro, con mucho picante.