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Aseguran que el embarazo adolescente bajó 20% en Argentina

cifras

Desde la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia de la Nación, dieron a conocer las el porcentaje en el marco de una jornada sobre embarazo no intencional en la adolescencia que se realizó en la ciudad de Salta.





El secretario de Niñez, Adolescencia y Familia, de la Nación, Gabriel Castelli,  anunció que el embarazo adolescente bajó un 20% en los últimos tres años en la Argentina. La cifra se dio a conocer en el marco de  una jornada sobre embarazo no intencional en la adolescencia que se realizó en la ciudad de Salta.

Tucumán es una de las provincias en las que funciona el Plan Nacional de Prevención del Embarazo No Intencional en la Adolescencia (ENIA), al que se le atribuye la disminución. Castelli declaró a Télam que en 2015 hubo 111.699 nacimientos de madres adolescentes menores de 20 años. y en 2018 bajó a 87.118. "Hace tres años hubo también 108.912 embarazos de niñas de entre 15 y 19 años. El año pasado la cifra fue de 84.768", detalló.

La actividad que se desarrolló en Salta, una de las 12 provincias en las que funciona el Plan ENIA y  fue organizada con el apoyo del Fondo de Población de Naciones Unidas y Unicef. La socióloga Silvina Ramos, coordinadora del Plan, detalló que las provincias en las que se implementa, "fueron seleccionados por tener las tasas más elevadas de embarazos adolescentes".

Tucumán, Jujuy, Santiago del Estero, Formosa, Chaco, Misiones, Catamarca, Entre Ríos, Corrientes, La Rioja y la provincia de Buenos Aires, son las otras provincias donde se aplica el proyecto gubernamental. En el conurbano bonaerense se incluyó a Lanús, San Isidro, Quilmes, Almirante Brown, San Martín y Morón. "Dentro de esas provincias, trabajamos en 36 departamentos donde identificamos escuelas. Allí se capacitó a más de 12.000 docentes para atender la demanda de casi el 50% de adolescentes de cada distrito", detalló el titular de Niñez.

Por su parte, Ramos destacó que "ser padre o madre en esa etapa de la vida, sobre todo si no es planeado, es duro. Los pone en situaciones de desventaja para desarrollar sus aspiraciones educativas, laborales, su construcción adulta, porque se dedican a cuidar un bebé que implica un conjunto de responsabilidades para lo que no están preparados".