La iniciativa para mejorar el acceso a colectivos que fue postergada

Unidad Plegable de Acceso (UPA) se llama la iniciativa que en 2018 parecía destinada a solucionar uno de los inconvenientes que presentan a diario los colectivos a buena parte de sus usuarios: la altura de los accesos. Para una persona común, sin limitaciones motrices, la distancia entre el suelo y el primer escalón del ómnibus no demanda mayor esfuerzo. Sin embargo, para quienes poseen movilidad reducida, subir a una unidad se les puede tornar cuesta arriba, debiendo valerse de las barandas ubicadas en los laterales del ingreso.

Lorena Gutiérrez es diseñadora gráfica, fotógrafa, docente y creadora de la iniciativa que consiste, básicamente, en un peldaño plegable que los choferes pueden ofrecer a los pasajeros para que ingresen sin esfuerzos físicos adicionales, y que se activa con solo presionar un botón. La propuesta, que además es única en la región, ganó trascendencia el año pasado y estuvo a un paso de ser implementada. Barato, fácil de construir y de instalar, en la actualidad el proyecto se encuentra a la espera de interesados, es decir, de la Municipalidad capitalina, de la Provincia y los empresarios.

“Me llamaron para interiorizarse, pero después no hubo una ayuda en concreto”, recuerda Lorena sobre la primera y única vez que autoridades municipales le contactaron para conocer su idea. “Estoy yo sola hablando de línea en línea; es muy difícil empujar sola un proyecto tan grande”, se lamenta en diálogo con eltucumano.com, luego de que se conociera la intención de la Subsecretaría de Tránsito y Transporte, de Enrique Romero, de priorizar la instalación de televisores en todas las unidades de colectivos del municipio.

La iniciativa UPA se implementó por primera vez en Tucumán en el Consultorio Móvil Solidario de la Línea 19, propiedad de la empresa de transporte ByV. Gutiérrez aspira poder realizar una prueba piloto con colectivos rurales, donde la ausencia de veredas ─en muchos casos─ suma centímetros y dificultad a los pasajeros a la hora de subir a las unidades.

“UPA es muy sencilla de fabricar, con materiales que se consiguen fácil y trabaja con sistemas neumáticos para abrir y cerrar puertas; en dos días las instalás”, explica su creadora, que además reconoce que su iniciativa es una medida paliativa para algo que debería ser obligatorio. “La obligatoriedad del piso bajo es lo que hay que hacer”, insiste.

En diciembre de 2018, la iniciativa UPA fue declarada de interés legislativo por la Legislatura provincial. El proyecto de resolución fue impulsado por el legislador Luis Brodersen. Hasta la fecha, no hay novedades sobre la implementación del peldaño en el transporte público.

La financiación del peldaño accesible, según indica la dueña de la iniciativa, no estaría a cargo ni de los empresarios de transporte ni del municipio o provincia. El modelo que propone Gutiérrez es la autofinanciación mediante empresas socialmente responsables del medio que consideren en sus presupuestos la ayuda a proyectos de impacto social.