Top

De halcones a palomas: Giros discursivos en la interna del FJT

OPINIÓN

Periodista y militante sindical, Martín Faciano analiza la interna del oficialismo provincial de cara a las próximas elecciones de 2019.

Foto Café Prensa.-


Si hubiera que ponerle un resultado parcial al partido chivo que vienen jugando el Vicegobernador Osvaldo Jaldo y el Senador Nacional José Alperovich, en el marco de la  interna desatada en el oficialismo provincial, en la antesala de las elecciones provinciales de 2019, podría decirse que hay un empate en el marcador global. Pero el vice tiene "ventaja deportiva" a su favor.

La distribución de bancas en partes iguales entre el Frente Justicialista por Tucumán (FJpT) y Cambiemos para el Bicentenario (CpB), en las elecciones legislativas nacionales de octubre, supuso un empate agónico por parte del Senador. Pero el recambio de autoridades en la  Honorable Legislatura, y el recorte que sufrieron allí algunos dirigentes vinculados a José Alperovich, golpearon anímicamente al comando que sostiene el “Operativo Retorno”, dejándole al mismo  más de un dirigente herido y con cicatrices que solo podrán curarse con la contención que pueda brindárseles desde algunos cargos a instancias del Poder Ejecutivo, o bien, con recursos económicos  provenientes de otra caja.

El último episodio de ajuste discrecional en el palacio de calle Muñecas, marcó quizás el fin del palo por palo que venían intercambiando el  ex Ministro del Interior de la provincia, y el ex mandatario. Es que “la poda” en la Legislatura, generó un cambio en la retórica de los voceros vinculados al ex gobernador. Así, dejando atrás el discurso beligerante y asumiendo un tono pacifista, los halcones del alperovichismo se convirtieron en palomas de la paz que ahora predican “la unidad”.

Pero el giro discursivo que aflora desde las huestes del Senador Nacional, también ha modificado tácita y tácticamente su objetivo, apuntando a erosionar  ahora la legitimidad de otro sujeto: la del Gobernador Juan Manzur. Para ello, los operadores políticos  vinculados al ex mandamás, apuestan al ninguneo del Gobernador, señalando que quienes realmente detentan el poder político territorial en la provincia son el Vicegobernador y el Senador Nacional, motivo por el cual, la responsabilidad de la continuidad del proyecto político del oficialismo provincial recae principalmente sobre ambos.

Desde el jaldismo, escuchan con desconfianza, miran de reojo y entienden la postura de los lobbystas como parte del tempestuoso vuelo que transitan las golondrinas que buscan desesperadamente hacer  verano en el 2019. Claro que para que eso ocurra, antes deberán sobrevivir al 2018, que correrá sin detenerse, con el juicio por el crimen de Paulina Lebbos que  se extenderá prácticamente durante todo el año.


Imágenes paganas

En consonancia con el comienzo del juicio por el asesinato de Paulina, la postal que eligió  el  ex gobernador, para demostrar en las redes sociales su training de campaña, fue una fotografía grupal que se tomó con los adultos mayores de un Centro de Jubilados que visitó  recientemente, de la mano del ex camporista Luis Larcher.

Alperovich ha decidido acentuar la dinámica electoralista que asumió desde el primer día que dejó el sillón de Lucas Córdoba. Para ello, comportándose más como un influencer que como un dirigente político, inunda las redes sociales con fotos de sus giras circuitales. En esa lógica flogger vale tanto una foto con Miguel Pichetto, (jefe  del interbloque Argentina Federal en el Senado de la Nación), como una placa con el histórico dirigente local Gumersindo Parajón.

 En la era digital, durante el auge del marketing político, nada  retrata con tanta fidelidad el culto al personalismo propio como las cuentas de las redes sociales de los políticos. Entre tantas fotos, el desafío para los analistas y dirigentes políticos, consiste justamente en no dejar de ver la película.


Sobre la electoralización de los tiempos políticos

La no sobreexposición mediática del binomio gubernamental, les ha permitido a las principales autoridades del Poder Ejecutivo provincial reducir los costos políticos que podrían haberse  generado con la apertura de la temporada de  lluvias e inundaciones. Aunque en este sentido, el fracaso del Plan Belgrano (con José Cano a la cabeza) haya resultado un aliado estratégico de la dupla  Manzur - Jaldo, el hecho de que ambos entiendan el presente como un tiempo fundamentalmente político, ha posibilitado una  distribución equitativa, con los referentes del Gobierno Nacional en la provincia,  de los costos ocasionados por estas lluvias que se parecen cada vez más a un desastre natural.

Si bien el peronismo no escribió sus 20 verdades sobre el manejo de los tiempos en la política, el radicalismo tampoco lo hizo.  Sabido es que la tajante separación entre los tiempos políticos y los tiempos electorales, por más indisociables que sean, se establece en función de si es que hay o no elecciones en el año en curso.

José  Cano, parece desconocer ese axioma básico y salió prematuramente a candidatearse  para los próximos comicios provinciales. Aunque Cano, personalmente no haya asumido mayores costos por el rotundo fracaso de su gestión en el Plan Belgrano, con las reiteradas derrotas electorales  sucesivas  y con su   imputación  por tentativa de negociados en el marco del escándalo denominado "Plan Coreano", el agua le está llegando al cuello. Desde la sede del centenario partido, y en el Municipio capitalino aseguran que para "El gallego", ya no habrá más salvavidas, a menos que los mismos sean de plomo.

Por más que desde el oficialismo provincial, le hayan restado trascendencia a la postulación prematura de Cano, tanto Juan Manzur como Osvaldo Jaldo anhelan una reedición de la tristemente célebre contienda electoral del 2015. Por las dudas, por más desdibujado que se vea, Domingo Amaya ratifica su identidad peronista.

Más allá de la pretensión de Alperovich, de volver a ocupar el centro del poder político, la sociedad política que conduce al actual FJpT parece funcionar a la perfección: mientras Jaldo se ocupa de sedimentar el esquema politico, cuidando a la tropa propia y a los aliados, el Gobernador Manzur se limita  a emular el estilo de su antecesor, enfocándose en la gestión, canalizando minuciosamente su bajo perfil confrontativo y disparando ocasionalmente algunas balas de goma al Gobierno Nacional. Sabe además, el ex Ministro de Salud de la Nación, que para el uso de las balas de plata y la munición gruesa habrá tiempo. Habrá que esperar a ver si los cañones apuntan hacia afuera o hacia adentro del FJpT.