Cagna disparó contra el árbitro y se fue cargado de bronca

La imagen después del partido ya es repetida: se abre la puerta que une el vestuario con la conferencia de prensa y el semblante de Diego Cagna está golpeado. Pero esta noche le sumó una buena dosis de bronca. El DT explotó contra el árbitro Pablo Echeverría, que cobró un polémico penal en el empate de Quilmes. "Nos juró por los hijos que había sido penal. No sé si tendrá hijos, pero por los hijos se no jura", disparó.  

¿Fue penal? Benegas durmió y Arce salió a cortar. Nouet toca antes la pelota y el arquero queda en el aire. Parece tocarle el pie, pero no para la teatral caída del delantero. Encima, en el segundo tiempo pasó algo parecido: Bieler cayó en el suelo cuando Trípodi salió a romper todo y el juez aplicó el siga-siga.

"Le quisimos mostrar el video y no quiso verlo. Es un error muy grave lo que nos cobró, pero el jugador no lo toca y el árbitro cobra el penal. Fue muy clara la falla y eso nos complicó", insistió Cagna, que había planteado un partido a la perfección hasta el empate del Cervecero.

Después, sí: el análisis del DT se centró en lo propio y dio nombres propios: "Prediger es fundamental para nosotros, pero Bossio lo reemplazó muy bien. Después fallaron algunos jugadores, como Galeano, que por eso se fue reemplazado. Sabemos que como locales nos está costando".

"Tuvimos treinta minutos muy buenos donde sacamos la diferencia. Hoy hubo un solo equipo en el partido. En el segundo tiempo fuimos protagonistas, pero no pudimos concretarlo en la red. Hicimos un buen partido pero nos vamos con bronca", remarcó Cagna, quien antes de subirse al micro se sacó selfies con los hinchas del Santo, pero no pudo esbozar sonrisas. Hoy no.