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Miranda se arrepiente de designar a Alperovich como sucesor: "Asumo mi error"

EN LA RADIO

El ex gobernador de Tucumán entre 1999 y 2003 reveló estar arrepentido de haber designado al actual senador como su sucesor. Realizó duras críticas al peronismo tucumano y a sus referentes actuales y adelantó a quién apoyaría como gobernador en 2019.





El ex gobernador de Tucumán, Julio Miranda, se encuentra alejado de la política. Vive en Buenos Aires y se dedica a su familia. Luego de varios años, volvió a contestar el teléfono a la prensa para recordar su paso por la gobernación de la provincia y opinar sobre sus sucesores y compañeros de partido.

Durante una entrevista radial brindada al programa Café Prensa, el ex mandatario se refirió en duros términos a la actualidad del peronismo tucumano. "Antes yo escuchaba la marcha peronista y se me paraban los pelos, ahora es mala palabra; no hay mucha política", criticó y recordó a Julio Domato y su slogan de campaña "gobernar con las puertas abiertas". Miranda dijo no reconocer liderazgo dentro del partido, que actualmente tiene al gobernador Juan Luis Manzur y al vicegobernador Osvaldo Jaldo como sus máximos referentes. Por el contrario, cree que en los últimos comicios triunfó la maquinaria por sobre los nombres. "No veo al peronismo acompañando a ningún líder, acá lo que está sobresaliendo y triunfando es la estructura", analizó.

Miranda considera que el espacio político local en los últimos años se encuentra alquilado y destaca al actual intendente de San Miguel de Tucumán, Germán Alfaro, como el único referente al que daría su apoyo. "Si yo apoyo a un peronista, sería a Germán Alfaro".

"Yo creo que hay un peronista que, yo siempre digo, que es un intendente que es barrero, que es el de Capital. Pero también es cierto que anda levantando piedra por piedra a ver si encuentra otro peronista que esté en condiciones", consideró. Al ser consultado sobre la alianza de Alfaro con Cambiemos, el ex gobernador lo justificó: "Lo que pasa es que el peronismo estaba alquilado, entonces no había peronistas. Tenía que remar con lo que fuera".

El tono de la charla cambió cuando se le consultó sobre José Alperovich, a quien él mismo ungió como gobernador en octubre de 2003. Arrepentido, el ex mandatario admitió que cometió un error al designarlo como su sucesor.

"Asumo mi error, creo que hay que hacer la autocrítica. También es cierto que no había muchos peronistas en ese momento", se lamentó. Además criticó duramente su gestión al frente de la Provincia: "Tuvo la suerte de llegar a un gobierno con mucha plata, pero lamentablemente no hizo nada".



En cuanto a las versiones que tildan a Alperovich de "traidor", acusado de redireccionar votos al bussismo en las últimas elecciones de medio término, Miranda consideró que, de ser cierto, no sería el único que se prestó para la traición: "Escucho algunas voces que dicen que José Jorge lo traicionó al peronismo. Y bueno, pero si traicionó es porque algunos peronistas se prestaron".

Pese a las críticas y a la falta de líderes que remarca, Miranda está seguro del dominio peronista en la provincia. "El peronismo siempre va a seguir ganando, Tucumán es peronista", concluyó.




Vale resaltar la cercanía del ex mandatario con Cambiemos. En diciembre de 2016, el propio Miranda organizó un acto en apoyo al intendente Germán Alfaro, al que asistieron el ex jefe municipal Domingo Amaya y el entonces director del Plan Belgrano José Cano. La relación con el radical se remonta a 2013, cuando fue candidato a diputado nacional por el Acuerdo Cívico y Social. Inclusive antes de la creación del Acuerdo para el Bicentenario, que compitió por la gobernación en 2015 con el binomio Cano-Amaya, desde el PRO rechazaban la alianza por los vínculos entre el dirigente de la UCR con el mirandismo. Como dato adicional, la hija de Julio Miranda ─Sandra─ se desempeña como directora de Familia y Desarrollo Comunitario de la Municipalidad capitalina.


Mirada nacional

"Creo que vamos a salir, pero estamos viviendo momentos duros. Cuando hubo una fiesta, alguien tiene que pagar. Vivimos 12 años de fiesta y con los subsidios se prestaba para la corrupción", opinó Julio Miranda sobre el actual gobierno del presidente Mauricio Macri.

También opinó sobre Cristina Fernández como dirigente. La acusó de no ser peronista y aseguró que quienes la apoyan son "peronistas que nacieron en los 90".


El peronómetro de Miranda

El ex gobernador aprovechó para referirse a sus compañeros de partido y no dudó a la hora de calificarlos de "peronistas" y "no peronistas":

- Juan Luis Manzur, gobernador: No peronista

- Osvaldo Jaldo, vicegobernador: No peronista

- Germán Alfaro, intendente de Capital: Peronista

- Beatriz Ávila, diputada electa: Peronista

- Juan Ruíz Olivares, vicepresidente I° de la Legislatura: Peronista parcial


Desnutrición

El ex gobernador recordó la crisis que sufrió durante su gobierno cuando la desnutrición en la provincia tomó estado nacional por el caso de Barbarita. Para Miranda, el informe que se emitió por el programa conducido por el periodista Jorge Lanata fue una campaña mediática para desprestigiarlo.

"Hay muchas campañas mediáticas, yo tuve la campaña esta para difamar de los desnutridos. Resulta que había desnutridos y de pronto desapareció, cuando esto es una patología que dura cinco o seis años. Digo yo, no soy juez", analizó el político retirado.



En 2002 se calculaba un total de 18.000 chicos desnutridos en la provincia, pertenecientes a más de 46.000 hogares en situación de riesgo. Un 1% de esa cifra ─unos 111 casos─ correspondía a desnutrición severa (de grado 3). Un 90% de los menores desnutridos registrados padecía una desnutrición leve (de grado 1); y un 9%, moderada (de grado 2).

Una proyección hecha en abril de 2002 por el Sistema de Información, Evaluación y Monitoreo de Programas Sociales (Siempro), de la Presidencia de la Nación, calculaba que había entonces en Tucumán 52.000 hogares indigentes (16% del total), lo que implicaba más de 257.000 personas (19,2% de la población). La indigencia se define por ingresos que no permiten acceder a la canasta alimentaria básica.