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Quieren que te sientas solo

Opinión

Antonio Leone hace foco y analiza la percepción social sobre el caso Maldonado y las estrategias del gobierno nacional para mitigar el clamor popular que lo responsabiliza por la muerte del joven.


Veo en nuestros grupos un abatimiento generalizado. Y no es para menos, todos los días hay malas o terribles noticias. Pero hay una parte de la realidad que no estamos apreciando. No todos somos mala gente, hay una mayoría que no lo somos.


Más allá del incomparable dolor de la familia de Santiago Maldonado y de que jamás asimilemos una injusta muerte, más allá de la indignación y estupor que nos llegó a todos al haber encontrado su cuerpo y peor, al haber confirmado que era él. Más allá de lo inentendible, hay que tomerse un instante y reflexionar qué sociedad somos y qué queremos ser.


En donde se hicieron sondeos, casi dos de cada tres argentinos sostienen que la responsabilidad de la muerte de Santiago Maldonado es del Gobierno Nacional y son muy pocos los que sospechan de la comunidad mapuche o le adjudican la responsabilidad a la justicia.


"Hay todavía demasiados interrogantes –sostiene Bacman–. Mientras tanto, la gente va tomando partido, estructura opiniones, genera actitudes. En síntesis, hasta que la verdad salga definitivamente a la luz, importan más las percepciones. Es lo que se denomina realidad percibida. En este trabajo de campo –explica el titular del CEOP, que tuvo a cargo la encuesta–, realizado en la provincia de Buenos Aires a un día de encontrado el cuerpo, algo más de seis de cada diez bonaerenses dejan al descubierto su convencimiento de que el gobierno nacional sigue siendo el principal responsable de esta desaparición. La figura que de manera más contundente carga sobre su espalda tal responsabilidad, es Patricia Bullrich, por su rol de ministra de Seguridad y por una supuesta protección al accionar de la Gendarmería".


Como dice Jorge Kostinger, "La estrategia es que te sientas solo. La estrategia es que creas que pertenecés a una minoría insignificante... La estrategia es poner a 200 monos a decir barbaridades por las redes, fingiendo una mayoría a la que las mentes débiles se sumarán diciendo, repitiendo, regurgitando barbaridades".


No sé si este terrible caso impactará en el resultado electoral. Estos tipos gozan de una protección mediática increíble. Pero sus propias encuestas deben haberle resultado mal, muy mal. Están asustados y a la defensiva.


La parte de la realidad que no estamos valorando es que rompimos el blindaje mediático, que nos movilizamos y LOS DERROTAMOS.


Por lo pronto, la campaña de persecución judicial se hizo añicos. Nadie presta atención a las barbaridades de Comodoro Py y su coro mediático. En la última semana, el Pro se quedó sin campaña, con sus candidatos mudos o diciendo barbaridades como la Carrió, su primera espada mediática.


Se rompió el pacto de impunidad con el que el Pro quería blindar a las fuerzas represivas y transformarlas en una banda de capangas, sus capangas.


Si hubiéramos tenido este nivel de conciencia, consenso y organización en el año`75, los desaparecidos no hubieran sido 30.000.


Tenemos que mirar todo y no sólo lo malo, si no podemos identificar las victorias, aunque sean pequeñas (y no es el caso) no podremos acertar el camino para recuperar la Patria.


Pero lo más importante: ahora saben que reprimir no es gratis, ni siquiera para ellos.


Ahora saben que no pasarán de los límites que estableció la Sociedad en 1983.


Ahora saben que Nunca más es NUNCA MÁS.


Vienen muy al caso las palabras con las que el líder laborista inglés Jeremy Corbyn terminaba sus discursos de campaña:


"We are the many, they are the few”; “Levántense como leones después del letargo... sacúdanse las cadenas que los han atado, como si fueran gotas de rocío. Nosotros somos muchos, ellos son los pocos".


Nuestros triunfos son el triunfo de la ética y la justicia.


Es el camino del Hombre Nuevo.