Top

Angélica convirtió a su bicicleta en "mini auto" ecológico

En dos ruedas

Un año atrás decidió preparar su bici para que no muera de calor con el sol y cuando llueva, llegue seca a casa. Hoy, que es mucho más que eso, se roba todas las miradas del centro.




Angélica Ledesma hace su vida arriba de su "mini auto", forma en la que se refiere, con cariño, a su bicicleta. Desde hace más de un año le puso techo a su Fiorenza color verde oscuro y su vehículo se transformó en algo único: “Cuando veo algo nuevo, se lo agrego", dice.

La bicicleta de Angélica tiene un techo de lonas soportado por una estructura tubular de aluminio. En su interior puede poderle un ventilador, un soporte para el celular, un parlante con bluetooth, un canasto y un cobertor con parasol, según lo que necesite cada día: “Cuando hay sol no me muero de calor y cuando llueve siempre llego seca”, afirma con una sonrisa.  


Nació en Perico, Jujuy, hace poquito más de 50 años, pero en su adolescencia decidió venir a Tucumán para estudiar y trabajar. Siempre se movió en bicicleta. Para ella es un medio transporte económico, fácil de andar y más seguro que la moto o el auto.

“Cuando empecé a armarla me decían que se me iban a reír en la calle”, comenta sobre los desacertados pronósticos de algunos de sus amigos. Hoy recorre las calles del centro orgullosa con su bicicleta mientras se roba las miradas de los peatones.

La capota parece un huevo acostado, entonces al pedalear no tiene que pelar tanto contra el viento. Y los días de sol, el parasol hace que no muera de calor.


Contrario a muchas opiniones, sostiene que mientras se sea prudente la bicicleta no presenta ningún riesgo. “Sería lindo tener bici sendas en las avenidas y algunas calles transitadas pero sí hay respeto por el ciclista”, opina.  

¿Es posible estar cómoda y segura  andando en bicicleta por las calles tucumanas? Para Angélica sí. "Espero que sirva de inspiración para que otros se animen a pedalear y abandonar los autos", dice y pedalea una vez más.