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"A algunos les cuesta creer que una mina pueda hacer humor"

BIRRITA EN LA VEREDA

Barbi Tarcic, humorista tucumana, reconoce altísimos niveles de misoginia en las redes sociales. Ante el ataque a La Cope, acompaña: "A la gilada ni cabida".





“A algunos les cuesta creer que una mina pueda hacer humor”
Bárbara Tarcic hace stand up y escribe situaciones cotidianas con un giro humorístico. Ante el ataque a La Cope, reconoce la misoginia que circula en las redes sociales.
“Perdón. Siempre pensé que "rápido y furioso" era una saga de películas porno”, confiesa en sus redes. Bárbara Tarcic, Barbi, hace stand up y escribe peripecias de la vida cotidiana con un giro humorístico. Ante el ataque cibernético que sufrió la humorista gráfica La Cope durante los últimos días, reconoce: “muchos dicen que hacer humor y ser mujer no son compatibles”.
“A algunos les cuesta creer que una mina pueda hacer humor, o que podamos reírnos de las mismas cosas que se ríen los hombres, porque para mí el humor no reconoce género. Además, muchas veces no creen que sea compatible con estereotipos de belleza, porque para hacer humor se requiere una mirada crítica y ácida con el mundo, entonces la combinación no cierra”, asegura. 
Sin embargo, reconoce que en Tucumán no vivió experiencias desagradables. “Tuve algunos malos entendidos, gente sin humor hay en todos lados, pero nunca me pasó algo así. Aquí tienden a ser cariñosos, a encontrarme en la calle y contarme que se ríen con lo que escribo. Pero es cierto que en general, y sobre todo en las redes, se viven unos niveles increíbles de misoginia”, reconoce.
El ataque
“Cuando leí el bardo que se armó con La Cope traté de recapitular qué estaba pasando. Recuerdo haber leído-visto la tira de la discordia y pensado: ‘estoy vieja para la birrita en la vereda, temo por mi ciática’, pero doy fe de que mi ser de hace 15 años bancaba esa cita total y absolutamente. No entiendo la discordia, no entiendo el enojo y mucho menos la barbarie y los ataques”, reflexiona.
“Creo que simplemente la atacaron porque es mujer y propone una cita en la que dos personas, sean del género que sean, puedan estar en igualdad de condiciones: sin el “emperifollado” de entrar en un vestido, unos zapatos –seguramente incómodos- o maquillaje. Eso a algunos, se ve, les molesta”, asegura.
Y expresa su solidaridad: “Si pudiera decirle algo a La Cope sería: ‘a la gilada ni cabida. Ladran Sancho, señal que cabalgamos. Fuerza compañera, no estás sola”. 

Perdón. Siempre pensé que "Rápido y Furioso" era una saga de películas porno”, confiesa en sus redes. Bárbara Tarcic, Barbi, hace stand up y escribe peripecias de la vida cotidiana con un giro humorístico. Ante el ataque cibernético que sufrió la humorista gráfica La Cope durante los últimos días, la tucumana reconoce: “muchos dicen que hacer humor y ser mujer no son compatibles”.

A algunos les cuesta creer que una mina pueda hacer humor, o que podamos reírnos de las mismas cosas que se ríen los hombres, porque para mí el humor no reconoce género. Además, muchas veces no creen que sea compatible con estereotipos de belleza, porque para hacer humor se requiere una mirada crítica y ácida con el mundo, entonces la combinación no cierra”, asegura. 

Sin embargo, reconoce que en Tucumán no vivió experiencias desagradables. “Tuve algunos malos entendidos, gente sin humor hay en todos lados, pero nunca me pasó algo así. Aquí tienden a ser cariñosos, a encontrarme en la calle y contarme que se ríen con lo que escribo. Pero es cierto que en general, y sobre todo en las redes, se viven unos niveles increíbles de misoginia”, reconoce.

El ataque

“Cuando leí el bardo que se armó con La Cope traté de recapitular qué estaba pasando. Recuerdo haber leído-visto la tira de la discordia y pensado: ‘estoy vieja para la birrita en la vereda, temo por mi ciática’, pero doy fe de que mi ser de hace 15 años bancaba esa cita total y absolutamente. No entiendo la discordia, no entiendo el enojo y mucho menos la barbarie y los ataques”, reflexiona.

“Creo que simplemente la atacaron porque es mujer y propone una cita en la que dos personas, sean del género que sean, puedan estar en igualdad de condiciones: sin el “emperifollado” de entrar en un vestido, unos zapatos –seguramente incómodos- o maquillaje. Eso a algunos, se ve, les molesta”, asegura.

Y expresa su solidaridad: “Si pudiera decirle algo a La Cope sería: ‘a la gilada ni cabida. Ladran Sancho, señal que cabalgamos. Fuerza compañera, no estás sola”.